martes, 27 de enero de 2009

semana a semana


Edad gestacional Talla Peso
(Desde la cabeza a las nalgas: longitud craneo-rabadilla)



8 semanas 1.6 cm 1 gramo
9 semanas 2.3 cm 2 gramos
10 semanas 3.1 cm 4 gramos
11 semanas 4.1 cm 7 gramos
12 semanas 5.4 cm 14 gramos
13 semanas 7.4 cm 23 gramos
14 semanas 8.7 cm 43 gramos
15 semanas 10.1 cm 70 gramos
16 semanas 11.6 cm 100 gramos
17 semanas 13 cm 140 gramos
18 semanas 14.2 cm 190 gramos
19 semanas 15.3 cm 240 gramos
20 semanas 16.4 cm 300 gramos

(Desde la cabeza a los pies)
20 semanas 25.6 cm 300 gramos
21 semanas 26.7 cm 360 gramos
22 semanas 27.8 cm 430 gramos
23 semanas 28.9 cm 501 gramos
24 semanas 30 cm 600 gramos
25 semanas 34.6 cm 660 gramos
26 semanas 35.6 cm 760 gramos
27 semanas 36.6 cm 875 gramos
28 semanas 37.6 cm 1005 gramos
29 semanas 38.6 cm 1153 gramos
30 semanas 39.9 cm 1319 gramos
31 semanas 41.1 cm 1502 gramos
32 semanas 42.4 cm 1702 gramos
33 semanas 43.7 cm 1918 gramos
34 semanas 45 cm 2146 gramos
35 semanas 46.2 cm 2383 gramos
36 semanas 47.4 cm 2622 gramos
37 semanas 48.6 cm 2859 gramos
38 semanas 49.8 cm 3083 gramos
39 semanas 50.7 cm 3288 gramos
40 semanas 51.2 cm 3462 gramos
41 semanas 51.7 cm 3597 gramos
42 semanas 51.5 cm 3685 gramos

Faltan 2 semanas ó 14 días para el parto

desarrollo del bebe 38 semanas

Tu bebé tiene 36 semanas de vida, mide entre 48 y 50 cm. (19.2 y 20 pulg.) y pesa alrededor de 3.300 gramos (7.3 lbs.).
El lanugo (pelito que cubría su cuerpo) está desapareciendo y el unto sebáceo (crema que cubre su piel) es más abundante y servirá de ahora en más para permitir el deslizamiento del bebé en el canal del parto.
Sus intestinos han comenzado a producir una sustancia llamada meconio que es su primera materia fecal. La misma se eliminará, en condiciones normales, después del nacimiento.

miércoles, 21 de enero de 2009

Desarrollo del Feto - Semana 36

Medidas: 35 cm/14 pulgadas
Medida Completa: 47 cm/21 pulgadas
Peso: 3100g/6.8 libras

Aunque tu barriga no crecerá más, es posible que te sientas cada vez más incómoda y no puedas dormir bien...pero ¡guarda tus energías, que pronto las necesitarás!
El líquido amniótico pasó de una gota al principio de tu embarazo a un litro.

Igualmente, la placenta ahora mide aproximadamente 7 pulgadas (casi 18 cms) y pesa un promedio de 2 libras (poco menos de un kilo). Los pulmones de tu bebé están desarrollados y no existe problema alguno si decide llegar al mundo en cualquier momento.

Aunque falta muy poco, ten en mente que muy pocas mujeres dan a luz en la fecha estimada de parto, así que presta atención a cualquier síntoma de que estás en trabajo de parto.

martes, 6 de enero de 2009

Sintomas de parto

¿Cómo saber cuando el parto ha comenzado?
Un par de semanas antes de llegado el momento, el bebé comenzará a colocarse de cabeza dentro de tu abdomen ("encajarse"), cuando ello ocurra te darás cuenta porque vista de perfil, tu abdomen se verá caído, y lo sentirás duro al tacto, debido al aumento de intensidad de las contracciones que produce la acomodación del feto.
Estas pequeñas contracciones antes del parto serán leves y muy irregulares, localizadas en la parte inferior del abdomen o las ingles, sin irradiarse a los riñones. Ellas son sólo un indicio de que tu bebé está tomando la posición de salida y generalmente cesan por sí solas.
Además de eso puedes notar fatiga, insomnio y disminución de los movimientos fetales.
Sin embargo, hay tres síntomas o señales claras que te indicaran que el momento del parto ha llegado, que son:
  1. Caída del tapón mucoso: Hay un signo inequívoco del comienzo del trabajo de parto y es la caída del tapón mucoso que cierra el cuello del útero. Se trata de una escasa cantidad de flujo más denso y espeso que lo habitual, manchado de sangre. Significa que la gestación ha llegado a su final y que es muy probable que el parto propiamente tal se inicie en poco tiempo. Es la más seria señal para que la mujer se prepare y esté alerta.

Qué hacer: En numerosas ocaciones la expulsión tiene lugar muchos días antes del parto, asi es que no te pongas nerviosa. Llama a la matrona o a tu médico y avísale. Pero espera a tener contracciones fuertes y regulares (dolores sostenidos referidos a la parte baja del abdomen o la región baja de la espalda, que se producen a intervalos regulares e idénticos) o a romper la bolsa de aguas para trasladarte a la clínica.

lunes, 5 de enero de 2009

Examenes de rutina para la embarazada

Durante tu primera visita al doctor, como en las sucesivas se te practicarán una serie de exámenes y análisis destinados a medir el estado general de tu salud y el normal desarrollo de tu hijito. Estos son:

Análisis de sangre

Se pide sólo en la primera visita, salvo que se presenten complicaciones.
Se te extraerá sangre de la parte interna del brazo (a la altura del codo), para determinar:

  • Tu grupo sanguíneo.
  • La cantidad de componentes que tiene tu sangre (para averiguar si tienes anemia u otra anomalía).
  • Anticuerpos contra la rubéola.
  • Anticuerpos contra la sífilis, otras enfermedades infecciosas y el virus del SIDA.
  • Si eres portadora de alguna enfermedad hereditaria.

Análisis de orina

Se pide en casi todos los controles, para investigar:

  • La presencia de azúcar en la sangre (glucosa). Si la hay puede indicar una diabetes.
  • La presencia de proteínas que indicarían una falla renal. Si las hay hacia fines del embarazo, ello obliga a pensar en una pre-eclampsia.

Control de la presión arterial

Por lo general la presión arterial disminuye al comienzo del embarazo. En esta época de la vida normalmente la máxima no debe exceder los 120 mm. de mercurio y la mínima los 70 o los 80. Si estas marcas superan los 140 y 90, respectivamente, habrá que hacer otros exámenes para identificar la causa de la anomalía.

Examen ginecológico

En la primera y algunas de las sucesivas visitas al médico, éste te realizará exámenes ginecológicos que no pondrán en peligro la vida de tu pequeño. El primer examen de este tipo se hará para constatar que no hay anomalías ni patologías en la región pelviana y que el cuello de útero está cerrado y en perfectas condiciones. En esta visita también se te sacará una muestra para realizar un PAP.

Latidos fetales

Gracias a un aparato de ultrasonido que aumenta los latidos cardíacos fetales, el médico irá controlando la evolución del embarazo. Los aparatos modernos registran los latidos del feto a partir de las 10 semanas de vida.

Palpaciones abdominales

Por medio de estas palpaciones que el médico realiza sobre tu abdomen va registrando el crecimiento de tu bebé, y hacia el tercer trimestre, la ubicación de su cabeza. Antes del parto estas palpaciones serán una forma de apreciar el encaje de la cabeza de tu bebé.

Ecografías

Este maravilloso examen te permitirá ver a tu bebé claramente dentro de tu vientre. Consiste en la aplicación de un gel sobre tu abdomen por el que se pasará un transductor que emite ultrasonido que al ser recuperado se convierte en imágenes que aparecen sobre un monitor de televisión.

A pesar de que muchos médicos piden el primero de estos exámenes a las 16 semanas de embarazo, otros facultativos se arriesgan a solicitarlo entre las 6 y las 12. Actualmente se está desarrollando un tipo de ecografía tridimensional y en colores que te permitirá ver, con mucha más claridad que hasta el momento, como tu hijito va creciendo.

El sexo del bebé se puede determinar desde la semana 28, con cierto grado de confiabilidad, ya que hay que reconocer que si el bebé se empeña, jamás mostrará lo que nos interesa ver y nos reservará la sorpresa hasta el momento de nacer...,¡como antes!

La ecografía permite:

  • Controlar el normal crecimiento del bebé.
  • Determinar al edad gestacional y probable fecha de parto.
  • Ubicar la posición del bebé y la de la placenta, en caso de tener que practicar alguna punción o biopsia corial, o para determinar la existencia de una placenta previa.
  • Detectar anomalías en el desarrollo neurológico (cerebro y médula espinal) del feto.
  • Confirmar o descartar nacimientos múltiples.

Amniocéntesis

Es una punción que se realiza por tu abdomen para extaer líquido amniótico que permitirá detectar alteraciones como el síndrome de Dawn o la espina bífida. Este estudio requiere de experiencia e información.

Mediante una ecogradía se determina la posición de la placenta y el bebé, para, a través de la pared abdominal, introducir una aguja que consigue obtener una muestra de líquido amniótico que permitirá -previo análisis- determinar la existencia de alguna anomalía que presente problemas posteriores.

domingo, 4 de enero de 2009

Signos de alarma

Estar embarazada no es estar enferma, sino protagonizar una de las más maravillosas misiones deparadas a la mujer: la de procrear junto a su pareja una nueva vida y prestar tu cuerpo para que en su interior se desarrolle la vida de tu hijo.

A pesar de que ésta es una de las mejores épocas de tu vida, podría presentarse algunas anomalía que requiera de atención médica rápida para prevenir y evitar cualquier problema.

Estos signos de que "algo no anda bien " son:


  • Intenso dolor de cabeza que no logras aliviar.
  • Vision borrosa o brumosa.
  • Dolor de estómago intenso.
  • Colitis prolongada o vómitos frecuentes e intensos.
  • Hemorragia vaginal.
  • Enronchamiento y picazón intensa en cualquier zona del cuerpo.
  • Escurrimiento de líquido por la vagina que pueda hacer sospechar la rotura de la bolsa de aguas (líquido con olor a cloro o semen).
  • Micción frecuente o dolorosa. (micción: es el proceso por el que la vejiga urinaria se vacía de orina cuando está llena).
  • Hinchazón sospechosa en manos tobillos o rostro.
  • Fiebre de más de 38 grados.
  • Ausencia de movimientos fetales o pataditas, durante las últimas 12 horas, a partir de la semana 28.
Ante cualquiera de estos síntomas debes llamar al médico de inmediato para pedirle que te reciba en su consulta lo antes posible.


visita también estas otras entradas:
etapas de trabajo de parto
placenta previa y desprendimiento de placenta 
hipertension en el embarazo 
señales de riesgo en el embarazo 
abandonar el cigarrillo en el embarazo 
placenta previa y desprendimiento de placenta 

sábado, 3 de enero de 2009

Madre vegetariana

La busqueda de una mejor calidad de vida a llevado a muchas personas a adoptar una alimentacion vegetariana, tendencia que cada día se hace más generalizada echando por tierra muchos mitos sobre el tema.

Estudios nutricionales han permitido a las principales organizaciones de la salud como la FAO, la OMS y también a la Unesco, desmentir la creencia de que no consumir proteínas animales puede generar graves problemas de salud, especialmente anemia.


Actualmente exiten muchas mujeres vegetarianas que se embarazan y que tienen bebés absolutamente normales y saludables, pero lo importante es adoptar este sistema de alimentación antes del embarazo y no durante la gestación.


Frutas y hortalizas, junto a cereales, legumbres y semillas oleaginosas aportan al organismo celulosa, vitaminas, sales minerales y ácido fólico, entre otros elementos nutricionales relevantes para una dieta equilibrada. Sin embargo, también es recomendable agregar a los vegetales lácteos, como yogurt y quesillo.


Los líquidos son muy necesarios, pero hay que beber fuera de las comidas. Se recomiendan

las tisanas, el café de malta o de higo y abundantes caldos de verdura.

Como mínimo hay que consumir un vegetal de color anaranjado o amarillo, cuatro veces por semanas. Entre éstos destacan la zanahoria, el zapallo; y cada día, un vegetal crudo de hojas verdes, como lechugas, apio, espinacas o acelgas. Asimismo, hay que agregar algún vegetal rico en vitamina C, como la naranja, el pomelo, el kiwi, el limón y el perejil, que además contienen vitamina B 12.


Aceite de oliva extra virgen, nueces, avellanas, semillas de girasol, aceitunas, paltas, mantequilla de maní y almendras, también son parte de la dieta recomendada.



Una dieta Balanceada



Una mujer sana y activa, no debería hacer cambios drásticos en su alimentacion diaria.
Sin embargo, el médico que evaluará su estado físico al inicio del embarazo, será quien deberá recomendar la dieta adecuada para cada caso. En general, se recomienda no comer en exceso, es decir, no ingerir más de 40 calorías al día, por kilo de peso.
En otras palabras, si su peso normal es de 50 kilos, la ingesta de calorías debería promediar las 2000.

el aumento normal de peso de una embarazada debiera ser máximo de 11 kilos, al termino de la gestación. lo habitual es 2.5 kilos en los primeros 4 meses y el resto entre los 5 y los 9 meses.
En el caso de que la mujer tenga un peso muy bajo al inicio de la gestación, podrá subir hasta 14 kilos. Por esto, es importante el control médico permanente y ojalá el apoyo de una nutricionista.
Básicamente, se aconseja el consumo de los siguientes alimentos:

Recomendables
  • Lacteos: leche, yogurth, quesillo, queso.
  • Carnes: pollo, pavo, vacuno sin grasa. preferir las carnes a la parrilla o al horno.
  • Pescado: todo tipo
  • Legumbres: (una vez por semana)
  • Ensaladas: verdes
  • Vegetales, como la acelga y espinacas
  • Frutas (una o dos diarias)
  • Huevos
  • Pan integral

  • Frutos secos (almendras, pasas)
  • Agua mineral sin gas

No Recomendables
  • Chocolates y dulces en exceso
  • Mariscos
  • Alimentos fritos
  • Alcohol
  • Pescado ahumado
  • Salsas
  • Alimentos picantes
  • Gaseosas

  • Sal en exceso
libro recomendados para cuidar el peso en embarazadas.